Cuando el niño no hace caso

Juan está en el parque con su hija de cuatro años, Ana. Hace un día precioso y se lo están pasando estupendamente juntos. Ana le explica a su padre cómo jugar a un juego que se ha inventado y él disfruta dejando que ella lleve la voz cantante. Juegan a pillar, se tiran por el tobogán y montan en los columpios.

Cuando llega la hora de regresar a casa, Juan avisa unos minutos antes de que deben ir pensando en volver. Sin embargo, cuando llega el momento de irse, Juan está dispuesto, pero Ana no quiere. ¡Ella quiere seguir jugando porque se lo está pasando muy bien!

Juan se ablanda y consiente en seguir un ratito más, pero advierte de que después sí que tendrán que irse. Cuando pasa el rato, de nuevo, Ana todavía quiere seguir jugando.

Juan le ofrece a Ana seguir jugando cuando lleguen a casa, pero ella dice que no. Juan le pregunta si quiere la merienda, que está en el coche. Ana no quiere la merienda, sino que quiere parar a por un helado. Juan acepta comprar el helado de camino, pero hay que irse. Ana sigue jugando y Juan, fastidiado, se empieza a enfadar. Le encanta jugar con su hija,pero no soporta cuando no hace caso. Intenta dirigirla y que camine con él en dirección al coche. Prueba a ofrecerle alguna cosa más que a ella le guste. Luego intenta empujarla con suavidad hacia el coche, pero la niña se niega a moverse del parque.

Llegados a este punto, Juan tiene dos opciones: enfadarse mucho y gritar o amenazar a Ana con quitarle algún juguete o dejarla sin hacer algo que le guste, o bien sentarse en un banco y esperar a que Ana se aburra y quiera marcharse. En cualquiera de los dos casos, será Ana la que mande; es ella quien tiene el poder de elegir cuando regresan a casa.

A veces los niños necesitan que sus padres les dejen tomar la iniciativa, sobre todo cuando están jugando juntos. Esto permite a los niños ensanchar su mundo y descubrir nuevas formas de ser. Les da una ocasión para que parezca que mandan ellos y así experimentar el control; los padres deben concederles espacio para ello.

Sin embargo, los niños también deben saber que son sus padres quienes están a cargo. Así, se sentirán seguros sabiendo que, aunque a veces pueden elegir ellos, sus padres tomarán las decisiones difíciles y se mantendrán firmes.

Cuando lleguemos al punto de vernos tratando de convencer a nuestro hijo o hija de algo, a lo mejor es el momento de plantearnos si no deberíamos tomar la iniciativa un poco antes y de manera un poco más firme. Con ello, al final podríamos terminar siendo padres más amables ya que, si perdemos la paciencia intentando en vano poner límites al niño, éste puede acabar confuso con la situación, y nosotros frustrados.

Si es hora de irse a casa, de ponerse a hacer tareas o de ir al colegio, los padres deben mostrarse amables pero firmes para ayudar a sus hijos a pasar de una actividad a otra. Esto debería ser una parte de las rutinas diarias de convivencia. No hace falta dar premios ni imponer castigos, sino decir con calma que las cosas son así y se van a hacer de esta manera. Es hora de ponerse los calcetines y los zapatos. Hay que ir al coche. Por favor, agarra la mochila. Te ayudo a ponerte el abrigo. Es una pena tener que parar cuando te lo estás pasando tan bien, pero nos tenemos que ir ya.

Aprender a ser más grande, más fuerte, más sabio y amable con la escuela de crianza del Circulo de Seguridad TM significa que puedes disfrutar y apoyar la independencia de tus hijos, pero también que estarás activamente al mando cuando sea necesario. Un niño que está gestionando la transición de una actividad a otra y comprobando los límites necesita padres amables pero firmes que le guíen, para que su experiencia se desarrolle de manera estructurada y segura.

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Sobre la Instructora
Paternidad Proactiva
Dra. Deanna Marie Mason PhD
Mas de 20 años de experiencia clínica ayudando a familias: Licenciada en Enfermería, Máster en Práctica Avanzada de Enfermería: Pedriatric Nurse Practitioner y Doctorado (PhD) en enfermería. Profesora universitaria, especialista en educación del paciente, investigadora pediátrica, colaboración con publicaciones científicas internacionales de primer nivel, actividad filantrópica continuada relacionada con la promoción de la salud y el bienestar, esposa y madre de dos hijos.

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